TODA UNA VIDA DEDICADA A REFRESCAR CARTAYA Y DAR A CONOCER JIJONA
Hace más de 50 años y tres generaciones llegaron mis bisabuelos a Cartaya, mi madre se casó con Ricardo, mi padre, allí y él se convirtió también en heladero y jijonenco. Yo soy ya la 4ª generación de embajadores de Jijona en Huelva y mantengo la tradición de contar a todos lo mucho que le gusta Jijona. Con los cuadros, fotografías y la música y retransmisiones de las fiestas de Jijona convertimos la heladería en una embajada. Siempre recomendamos también que visiten la Feria de Navidad, que es algo digno de ver. Pero también se la damos a probar a pedacitos haciendo para los amigos la repostería típica: cocas, bambas, polvorones, toñas,… Cuando lo prueban descubren la gran variedad de una tradición artesana milenaria. Y para seguir formando parte de ella he estado haciendo mis prácticas en un horno tradicional de Jijona: para mantener la relación viva a través de las formas de trabajar ingredientes tan sencillos que consiguen cosas tan deliciosas. Como mitad cartayeros que somos, participamos en la Feria, en la Noche en Blanco, la feria del mosto, traemos a los niños de la escuela al obrador, somos parte de la Asociación de Comerciantes… siempre estamos inventando algo. No por nada, somos parte del equipo de heladeros jijonencos que ganó el record Guiness con 365 sabores diferentes de helado. Como jijonencos, somos socios de ANHCEA e intentamos salir a fiestas siempre.
LAS RECOMENDACIONES DE ARANXA PARA PROBAR LO MEJOR DE JIJONA
Lo que más sorprende cuando enseñamos Jijona es lo antiguo y montañoso que es el pueblo. Esta hecho sobre la misma roca y eso es impresionante. Es pequeño y pintoresco con su casco antiguo. Tranquilo pero con muchas actividades como visitar el Museo del Turrón, o ver las ruinas del castillo con sus impresionantes vistas, además en 20 minutos tienes Alicante, Benidorm y todas las playas. Me gusta es salir de excursión con los amigos: al Forat de la Penya, la Sarga,… Un domingo perfecto en Jijona consistiría en comprar tus empanadillas o cualquier cosa típica para comer, darte un paseo por el campo, por ejemplo, hasta el Salt donde incluso, si quieres, puedes bañarte, ¡incluso en febrero! Hace muy buen tiempo. Es un pueblo tierno, muy familiar, y tranquilo, donde puedes venir a desconectar pero donde también puedes disfrutar de una noche de fiesta en los pubs locales con un ambiente muy divertido.
Y ENTRE TODA ESTA VARIEDAD, ¿CUÁL ES EL MOMENTO MÁS DELICIOSO PARA ARANXA?
Para mí Jijona es turrón, huele dulce… con todos esos aromas y todos los paisajes. Aprender a hacer y saborear toda su tradición culinaria tan antigua es una manera deliciosa de conocerla. La gastronomía de todos los abuelos y abuelas que preparaban sus platos a mano, los cultivaban como quien dice, son platos que son dignos de aprender, probar y de admirar.